Salvete, discipuli!
Tras estas gratificantes vacaciones hemos vuelto a las clases finalizando el taller de la bulla que realizamos al final del trimestre pasado. La bulla, como hemos visto en el tema dedicado a la infancia, era una especie de estuche esférico o lenticular, en cuyo interior se guardaban amuletos que servían de protección contra cualquier maleficio. Se les colgaba del cuello a los niños romanos en el momento de la imposición del nombre. Al entrar en la edad adulta, en torno a dieciséis años, la dejaban y pasaban a vestirse con la tunica pura.
Os doy las gracias a los alumnos de Cultura Clásica de 3º ESO A/B por haber participado y por haber realizado tan magníficas piezas. El resultado no ha podido ser mejor.
Para llevar a cabo el taller sólo hemos necesitado un cordel, un papel (para escribir un deseo y dejarlo dentro de nuestra bulla ) y, por último, arcilla que no necesite cocción y pintura para cubrirla.
Espero que os haya gustado.
Basia mille!